Hoy asistimos al silencio de la comunidad internacional en su máxima expresión. En otra época, una tal catástrofe humanitaria como la de Alepo se traducía en cientos de miles de personas protestando en las calles, en todo el mundo. En otra época, los gritos de la gente existían de verdad, e implicaban el cese obligatorio de la intervención armada en esos países. Hoy nadie grita… Pero gritando cambia todo. ¿Así terminó Vietnam, no?
Pues GRITEMOS. Guardemos 60 minutos de nuestras ajetreadas vidas, sólo 60 minutos, para gritar BASTA. Basta de masacres, basta de muertes de inocentes, basta de mirar hacia otro lado.
El próximo 12 de diciembre a las 18:30 en la Plaza Mayor, tod@s a la calle a gritar NO A LA GUERRA. Hagamos ruido, repitamos las antiguas CACEROLADAS.
Y a los que no podáis asistir, no os quedéis callados. Desde vuestras ventanas, casas, calles, trabajos….olla y cuchara en mano para decir BASTA YA DE MUERTES.